TEORIAS DE LA PERSONALIDAD
El hombre es una creación única, sea por una fuerza divina o de la naturaleza, vive su propia vida según sus diferencias, conservando una personalidad relativamente estable y duradera; las teorías de la personalidad nos sirve como un resumen del criterio de los teóricos acerca de la naturaleza humana en general y como una guía para entender un caso individual.
Se conoce históricamente distintas teorías o modelos de los diferentes autores con sus respectivas escuelas:
1. Teoría de la personalidad
de Freud: Siendo las más conocidas las del padre del
psicoanálisis, Sigmund Freud. Para él, el
comportamiento y la personalidad están vinculadas a la existencia de impulsos
que necesitamos llevar a la práctica y el conflicto que supone esta necesidad y
la limitación que la realidad supone para su cumplimiento. Se trata de un
modelo clínico e internalista.
En la segunda tópica Freud
determina una segunda gran estructura de la personalidad compatible con la
anterior, en el que la psique está configurada por tres instancias
psíquicas, el Id o Ello, el Yo y el Superyó. El
Ello es nuestra parte más instintiva, que rige y dirige la energía interna en
forma de impulsos y de la cual parten todas las demás estructuras.
2. Teoría de la personalidad
de Jung: Carl Jung proponía que la personalidad estaba configurada
por la persona o parte de nuestra personalidad que sirve para adaptarse al
medio y que se relaciona con lo que los demás pueden observar y la sombra o la
parte en que se incluyen aquellas partes del Yo que no resultan admisibles para
el propio sujeto.
3. Teoría fenomenológica de
Carl Rogers: Desde una perspectiva humanista-fenomenológica
de enfoque clínico, Carl Rogers propone que cada persona tiene su campo
fenomenológico o manera de ver el mundo, dependiendo la conducta de dicha
percepción.
La personalidad se deriva del
autoconcepto o simbolización de la experiencia de la propia existencia, la cual
surge de la integración de la tendencia a la actualización o tendencia a
mejorarse a sí mismo con las necesidades de sentir amor por parte del entorno y
de autoestima derivada del
contraste entre su conducta y la consideración o respuesta que reciba esta por parte
del entorno.
4. Teoría de los constructos
personales de Kelly: Como ejemplo de teoría de la personalidad
derivada del cognitivismo y el constructivismo podemos encontrar la teoría
de los constructos personales de Kelly, de enfoque también clínico. Para este
autor cada persona tiene su propia representación mental de la realidad y actúa
de manera científica intentando dar una explicación a lo que le rodea.
5. Teoría de la personalidad
ideográfica de Allport: Allport considera que cada individuo es
único en el sentido de que tiene una integración de las diferentes
características distinta del resto de personas (se basa en lo ideográfico, en
lo que nos hace únicos), así como que somos entes activos que nos
enfocamos hacia el cumplimiento de metas.
6. Teoría de la personalidad
de Cattell: La teoría de la personalidad de Raymond Cattell es una de las más
famosas y reconocidas teorías factoriales de la personalidad. Estructuralista,
correlacional e internalista al igual que Allport y partiendo del análisis del
léxico, considera que la personalidad puede entenderse como función de un
conjunto de rasgos, los cuales se entienden como la tendencia a reaccionar
de determinada manera a la realidad.
7. Teoría de la personalidad
de Eysenck: Desde una posición internalista y factorial
centrada en lo biológico, Eysenck genera una de las hipótesis explicativas
de la personalidad más importantes desde un enfoque correlacional. Este autor
genera el modelo PEN, el cual propone que las diferencias de personalidad se
basan en elementos biológicos que permiten procesos como la motivación o la
emoción.
La personalidad es una
estructura relativamente estable del carácter, el intelecto, el temperamento y
el físico, aportando respectivamente cada uno de ellos la voluntad, la
inteligencia, la emoción y los elementos biológicos que los permiten.
8. Teoría del Big Five de
Costa y McCrae: Otra de las grandes teorías factoriales y
basadas en un enfoque léxico (partiendo de la idea de que los términos con los
que explicamos nuestro comportamiento permiten tras un análisis factorial
establecer la existencia de agrupaciones de características o rasgos de
personalidad), el Big Five o teoría de los cinco grandes de Costa y McCrae
es uno de los modelos de personalidad más extendidos.
Mediante el análisis factorial
este modelo indica la existencia de cinco grandes factores de personalidad que
todos tenemos en mayor o menor grado. Se trata del neuroticismo o ajuste
emocional, la extraversión como cantidad e intensidad de relaciones personales,
la cordialidad como las cualidades vertidas en la interacción, la
responsabilidad o toma de conciencia, organización, control y motivación hacia
las metas y la apertura a la experiencia o interés en experimentar.
9. El modelo BIS Y BAS de Gray:
Gray
propone un modelo factorial y de carácter biológico en el que considera que
existen dos dimensiones que permiten elementos como la emoción y el
aprendizaje, partiendo de la combinación de los factores extraversión y
neuroticismo de Eysenck.
En este caso, se propone que
la ansiedad, como combinación entre introversión y neuroticismo, actuaría como
mecanismo inhibidor de la conducta (BIS o Behaviour Inhibition System),
mientras que la impulsividad (que equivaldría a una combinación entre
extraversión y neuroticismo) actuaría como mecanismo de aproximación y
motivación a la acción (BAS o Behaviour Approximation System). Ambos sistemas
actuarían en conjunto para regular nuestra conducta.
10. Modelo de Cloninger: Este
modelo contempla la existencia de elementos temperamentales, siendo estos la
evitación del dolor, la dependencia a la recompensa, la búsqueda de novedades y
la persistencia. Estos elementos de carácter biológico y adquirido darían
cuenta del patrón conductual que aplicamos en nuestra vida, y dependen en
gran medida del equilibrio neuroquímico del cerebro en lo que se refiere a los
neurotransmisores.
11. Teoría
del aprendizaje social de Rotter: Este autor considera que el patrón de
conducta que empleamos habitualmente es un elemento derivado del
aprendizaje y la interacción social. Considera al ser humano un elemento activo
y utiliza un enfoque cercano al conductismo. Actuamos en base a la existencia
de necesidades y de la visualización y valoración tanto de éstas como de las
posibles conductas que hemos aprendido a llevar a cabo. Aunque cercano al
interaccionismo, se sitúa en una perspectiva situacionista
Definiciones y características principales de los siguientes procesos psicológicos.
Los procesos psicológicos constituyen elementos fundamentales en el estudio de la psicología. Son los procesos que permiten a la persona tomar conciencia de sí misma y de su entorno, se encuentran en el origen de cualquier manifestación conductual y hacen posible el ajuste del comportamiento a las condiciones y demandas ambientales.
- Aprendizaje y memoria
- Lenguaje y pensamiento
- Emoción y motivación
- Atención, sensación y percepción.
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ResponderEliminarSi bien es cierto estas teorías nos sirven como un resumen del criterio de los teóricos acerca de la naturaleza humana en general y como guía para entender un caso individual.
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